No debà pensar jamás
En lograr tu corazón...
Y sin embargo te busqué
Hasta que un dÃa te encontré
Y con mis besos te aturdÃ
Sin importarme que eras buena...
Tu ilusión fue de cristal
Se rompió cuando partÃ,
Pues nunca, nunca más volvÃ
Qué amarga fue tu pena
No te olvides de mÃ...
De tu Gricel...
Me dijiste al besar
El Cristo aquel...
Y hoy que vivo enloquecido
Porque no te olvidé
Ni te acuerdas de mÃ
Gricel, Gricel
Me faltó después tu voz
Y el calor de tu mirar,
Y como un loco te busqué
Pero ya nunca te encontré,
Y en otros besos me aturdÃ.
Mi vida toda fue un engaño
Qué será, Gricel, de mÃ
Se cumplió la Ley de Dios,
Porque sus culpas ya pagó
Quien te hizo tanto daño.